¿Cuántos impuestos se pagan en Mónaco?

Existe una opinión muy extendida de que Mónaco es un país “completamente libre de impuestos”, lo cual no es para nada cierto: si bien en el Principado no existen muchos tributos, otros sí se aplican (incluso algunos que podrían sorprenderle).

Para aclarar esta cuestión, hemos creado esta guía breve pero completa sobre el marco fiscal monegasco.

Nuevo informe

Ya está disponible el informe en inglés «The definitive guide to living and paying taxes in Monaco», con información detallada sobre marco fiscal, residencia y sociedad de Monaco.

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Impuestos personales en Mónaco

Artículo principal: Impuesto sobre la renta en Mónaco

Mónaco es famoso por no imponer impuesto sobre la renta personal a sus residentes. Esta política está vigente desde 1869 y se aplica a todos los residentes, salvo a los ciudadanos franceses, quienes están sujetos a los términos de un tratado bilateral con Francia.

En resumen, salvo que sean ciudadanos franceses, los individuos residentes no están sujetos al impuesto sobre la renta en el Principado de Mónaco. Así, un residente en Mónaco no pagará impuestos sobre ningún ingreso personal, lo que incluye plusvalías, dividendos e intereses.

Tampoco existe impuesto sobre el patrimonio, impuesto anual sobre bienes inmuebles ni impuesto municipal.

Por supuesto, para disfrutar de la ventaja de no pagar estos impuestos, es necesario ser considerado residente fiscal en Mónaco. Para ello, el individuo debe solicitar un certificado fiscal que puede obtener cualquier persona que cumpla las condiciones pertinentes.

Desglosamos los requisitos en más detalle en nuestro artículo sobre residencia fiscal en Mónaco, pero una buena regla general para obtener y mantener la residencia fiscal en Mónaco es lograr la residencia administrativa y pasar al menos la mitad del año en el Principado. Incluso podrían bastar menos días si se pueden demostrar fuertes vínculos económicos con el país y que Mónaco es su residencia principal.

Impuesto sobre sucesiones y donaciones

A pesar de la reputación del Principado como un país sin impuestos, Mónaco sí aplica políticas tributarias específicas, especialmente en lo que respecta a impuestos sobre sucesiones y donaciones. Estos tributos se aplican a todos los activos situados en Mónaco, subrayando que, contrariamente a la creencia popular, existen obligaciones fiscales para los residentes y propietarios en este enclave prestigioso.

El impuesto sobre sucesiones se aplica únicamente a los activos localizados en Mónaco, independientemente del domicilio, residencia o nacionalidad del fallecido. Según la ley monegasca, la sucesión se rige por la ley del estado en el que el difunto tenía su domicilio al momento del fallecimiento.

Las tasas del impuesto sobre sucesiones dependen de la relación entre el fallecido y los herederos:

Esposo y beneficiario directo: 0%
Parejas en unión civil: 4%
Hermanos: 8%
Tíos, tías, sobrinos, sobrinas: 10%
Otros parientes: 13%
Beneficiarios no relacionados: 16%

El impuesto sobre las donaciones se aplica únicamente a los activos situados en Mónaco, sin importar el domicilio, residencia o nacionalidad del donante.

En el caso de las donaciones en Mónaco, estas deben registrarse (lo que se evidencia mediante una escritura notarial) y están sujetas al mismo tipo impositivo que el impuesto sobre sucesiones. Cuando los activos situados en Mónaco se donan (por testamento o de otra forma) a determinadas instituciones benéficas o al Principado, existe una exención fiscal.

Impuesto de sociedades

Artículo principal: Impuesto de sociedades en Mónaco

De nuevo, contrariamente a lo que muchos piensan, existen impuestos de sociedades en Mónaco. Las empresas en Mónaco están sujetas al impuesto sobre sociedades únicamente si realizan actividades industriales o comerciales y generan más del 25 % de sus ingresos fuera del Principado.

La tasa estándar del impuesto sobre sociedades es del 25 %, pero las nuevas empresas disfrutan de exenciones significativas: están completamente exentas durante los dos primeros años, seguidas de tasas que aumentan gradualmente hasta el quinto año.

No se aplican retenciones sobre dividendos ni sobre el pago de intereses de empresas con sede en Mónaco, y existen exenciones para dividendos recibidos de filiales bajo ciertas condiciones.

Sin embargo, Mónaco no tiene acuerdos de doble imposición con muchos países, por lo que los dividendos provenientes del extranjero podrían ser gravados en la fuente según su origen. Por favor, contáctenos para obtener más información al respecto.

Impuesto al Valor Agregado (IVA) y Tasa de Transmisión

Artículo principal: Impuesto sobre bienes inmuebles en Mónaco

En Mónaco, las compras están sujetas al IVA similar al de Francia, debido a su estatus aduanero en la UE. Por ello, Mónaco aplica el IVA a la misma tasa que Francia (20 %), abarcando la mayoría de bienes y servicios, con excepciones y reducciones específicas para ciertas categorías.

En el mercado inmobiliario monegasco, el IVA refleja el sistema francés y se aplica a la tasa estándar del 20 % en las transacciones inmobiliarias. Esto incluye la venta de terrenos edificables, construcciones nuevas o propiedades sustancialmente renovadas. Si el valor de mercado real de un inmueble es superior al precio de venta, el IVA se calcula sobre el valor de mercado.

Para propiedades antiguas que no califican como «nuevos edificios» y terrenos que no se clasifican como edificables, el IVA no se aplica. En cambio, se aplican derechos de transmisión en dichas transacciones. La tasa de la tasa de transmisión es del 4,5 % del valor de mercado si el comprador es un particular o una Sociedad Civil Personal Monegasca (SCP) calificada, y del 6,5 % para otros tipos de compradores. Los honorarios notariales también se suman al costo total de la transacción.

Otros impuestos y gravámenes

Mónaco cobra tasas de registro, impuestos de timbre y gravámenes sobre el alcohol y el tabaco. Las empresas deben pagar también una tasa por licencia comercial y los empleadores contribuyen a la seguridad social, que financia la sanidad y las pensiones.

Existe además un Impuesto de Arrendamiento del 1 %, que es un tributo sobre el alquiler de viviendas y debe ser pagado por el inquilino (no por el arrendador).

Ya no es un Paraíso Fiscal

Finalmente, es importante resaltar que, aunque históricamente se consideraba a Mónaco como un paraíso fiscal, ese estatus desapareció hace mucho tiempo. Y ello no se debe a que se hayan incrementado los impuestos (como se puede ver, son insignificantes), sino a que el Principado se ha alineado con todas las obligaciones internacionales en materia de transparencia y de intercambio de información.

Mónaco ha implementado diversas medidas para garantizar la transparencia financiera y combatir la evasión fiscal, entre ellas, la firma de acuerdos internacionales para el intercambio de información fiscal, el cumplimiento casi total de los requisitos de la OCDE y de los estándares fiscales internacionales.

No en vano ni la OCDE ni la UE lo consideran un paraíso fiscal hoy en día.

¿Pensando en Mónaco?

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Si está interesado en cambiar su residencia fiscal y no está seguro de que Mónaco sea su destino ideal, le recomendamos descargar y leer gratuitamente nuestro informe actualizado “La guía definitiva para vivir y pagar impuestos en Mónaco”, disponible a continuación.

Fuentes